En este artículo, vamos a ver por qué aclararse la piel, reconociendo si es necesario o es sólo una preferencia, qué tener en cuenta previamente y cuándo es mejor aclararse la piel. También veremos distintos métodos para aclarar la piel: naturales, cosméticos, peelings, con láser, con luz LED, con luz pulseada y dermatológicos, a los que me referiré brevemente. Por último, veremos qué tener en cuenta para elegir un tratamiento para aclarar la piel.
Existen diversas razones por las que una persona querría aclararse la piel, algunas más justificadas que otras.
Un caso, por ejemplo, es el de las personas de piel más oscura que tienen la idea de querer parecer más “blancas”. Esto puede o no ser una buena idea.
Como veremos, aclararse la piel es un proceso que tiene ciertos riesgos y que requiere de consistencia y precaución para conseguir buenos resultados.
A veces, es mejor aceptar tu tono de piel y no arriesgarse si no hay ninguna mácula o razón que lo justifique.
Si aún así se quiere aclarar, es importante seguir el proceso y no pretender un resultado “antinatural”, es decir, que una piel morena pase directamente a ser blanca como el papel. Esto podría implicar una serie de problemas, como la imposibilidad de exponerse al sol sin cuidados especiales. Por otra parte, conseguir un tono algo más claro puede mejorar la apariencia, en tanto la piel más clara está relacionada a la juventud. También puede que simplemente le “quede mejor” a la persona en particular.
Hablando de juventud, otro caso es el de personas que ya tienen una piel naturalmente blanca, pero la cual se oscureció como consecuencia del sol y el envejecimiento. Estas personas simplemente quieren recuperar su apariencia original, lo que también las hará verse más jóvenes …link envejecimiento….
Otro caso, es el del tratamiento de las manchas y el tono irregular. Estas pudieron aparecer por distintas causas: manchas por el acné, manchas solares, la edad, cambios hormonales, rosáce, etc.
Así, aclarar toda la piel puede presentarse como una solución, en tanto muchos tratamientos que tienen este efecto también uniforman el tono y, por supuesto, aclararán las manchas. De esta manera, sería un tratamiento correctivo, el cual, además, aumentaría la autoestima de la persona.
Asimismo, hay que tener en cuenta que las manchas solares y melasmas pueden volverse peligrosos si se deja que se desarrollen. Un tratamiento acalarante podría ayudar a prevenir esto.
También se da el caso de presentarse una gran cantidad de melasma y manchas de distintos tipos, en cuyo caso puede ser una buena opción recurrir a un dermatólogo (especialmente en el caso de que se observe que las alternativas cosméticas no están funcionando).
Así que, en resumen, una persona puede querer aclararse la piel para tratar manchas y otras imperfecciones, de mayor o menor visibilidad, para recobrar la apariencia original de la piel y verse más joven o por mera preferencia estética.
Ahora vamos a ver si estás preparada para aclararte la piel:
Antes de pensar en aclarare la piel, hay que tener ya una rutina de cuidado de la piel.
Porque, aunque a veces se te olvide o escape alguna cosa, es importante que hayas establecido ciertos hábitos antes de comenzar a aclararte la piel
Esto se debe a que mientras estés realizando el tratamiento, tu piel estará mas sensible, especialmente a los rayos UV. La razón es que los tratamientos para aclararse la piel suelen causar fotosensibilidad, de manera que, ante la exposición a la radiación UV, se pueden generar manchas.
Esto es justamente lo contrario de lo que queremos lograr, por lo que empezar un tratamiento de blanqueamiento de la piel sin una rutina de cuidado y protección sería contraproducente.
Como sabrás, una rutina de cuidados debe incluir la protección, que se refiere al uso de protector solar.
Para la cara (parte del cuerpo que se suele querer aclarar), implicaría usar un protector para rostro de FPS 50, en cantidades adecuadas y reaplicarlo cuando sea necesario. Además, habrá que evitar las horas de mayor radiación, alrededor del mediodía. También ayuda usar sombrero y gafas de sol.
Para saber más sobre cómo protegerte, podés leer los artículos sobre cómo protegerse más de la radiación UV y cómo elegir un protector solar.
Si tenés una rutina, pero no incluís la protección, es recomendable empezar a hacerlo. Incluso antes de comenzar con el aclarado de la piel, para que la rutina esté ya establecida y no tengas problemas después.
Tener ya establecida la regularidad en el cuidado de la piel también te ayudará a que el tratamiento sea efectivo, en caso de que estés usando algún método cosmético que requiera la aplicación diaria de activos.
También ayudará a mantener los resultados luego.
En teoría, podés realizar un tratamiento aclarante en cualquier época del año, siempre y cuando te cuides.
Sin embargo, como nunca sabes qué puede pasar, los meses de invierno se consideran los mejores para aclararse la piel.
Esto se debe a que, como el hemisferio en el que te encuentres estará mas alejado físicamente del sol, llegaran menos rayos UV, los cuales son la principal causa de efectos secundarios como manchas durante el tratamiento.
Los cuidados siguen siendo los mismos, pero, al menos, habrán menos riesgos y, al hacer frio, es probable que salgas menos y la exposición sea menor.
Si vivís en los trópicos, tené en cuenta que aún llegan los rayos UV en los días nublados, también en la época de monzones o húmeda. Más si tenés en cuenta que los rayos UV son aún más fuertes en estas latitudes, pues estás físicamente más cerca del sol de lo que estarías, por ejemplo, en el hemisferio sur en invierno. La medida en que llegan, sin embargo, dependerá de que tan cubierto esté el cielo: a más cubierto y oscuro, menos radiación.
Así que no te recomendaría ninguna época especifica, aunque puede dar más seguridad que sea en un momento en que tienda a nublarse más y permanezcas más tiempo en espacios cerrados.
Tené en cuenta que, en general, no habrá resultados rápidos, así que es mejor olvidarse de cualquier idea al respecto o video sobre “aclarado instantáneo”, “en sólo un día”, “tres días” o lo que sea. Por lo menos, no con métodos caseros o cosméticos.
Por ejemplo, se dice que aclararse la piel usando productos tópicos podría tardar de 3 a 6 meses o más.
Estos tiempos se reducen y, de hecho, pueden ser inmediatos, en el caso de otros tratamientos, como ciertos tipos de láser o de peeling.
Sin embargo, esta mayor efectividad puede conllevar mayores riesgos y requerir más tiempo de recuperación.
Por ejemplo, el láser podría causar irritación. Lo mismo puede suceder con un peeling químico, especialmente si se hace con algún ácido fuerte, con mucho producto o a las apuradas.
Además, como mencioné, los tratamientos suelen hacer que la piel sea más sensible a la luz del sol. Cuanto más fuerte el tratamiento, más sensible será.
Esta sensibilidad hará que la piel esté predispuesta a desarrollar manchas por la exposición a los rayos ultravioleta, lo que es contraproducente respecto al resultado que quieras lograr.
De esta manera, habrá un período de recuperación y en que te tendrás que cuidarte extra, usando protector solar y otras medidas.
Este tiempo de recuperación podría llegar a tardar entre 3 y 6 meses, por ejemplo, en el caso del láser.
De esta forma, a la final, siempre hay que ser paciente y darle tiempo.
Al menos, como regla general, sin descontar que algunos tratamientos tienen poco efectos secundarios y riesgos.
Existen varios métodos para aclararse la piel, desde naturales al uso de aparatología en centros de estética o clínicas.
Ahora los vamos a ver:
En Internet y las redes sociales se pueden encontrar muchas opciones para aclarar la piel con métodos “naturales”. Sin embargo, no todos son seguros o efectivos. Además, quienes publican sobre estos métodos suelen dejar los cuidados que se deben tener de lado.
Afortunadamente, esto no significa que no existan métodos naturales que funcionen y sean relativamente seguros.
Aquí voy a rescatar algunos de estos métodos:
La cúrcuma es un condimento originario de la India. En este país es utilizado en la medicina tradicional ayurvédica para tratar diversas dolencias y para cuidar de la piel. Es considerada la especie dorada de la India y un remedio para todo.
Es antioxidante, antibacterial, antiinflamatoria, antifúngico, anticancerígeno, antimutagénico, entre otros.
Ha sido utilizada pro más de 4000 años para el cuidado de la piel y la salud. En el Ayurveda, se considera que sirve para aclarar la piel y corregir el tono desigual, entre otros.
Asimismo, un estudio del 2017 indica que el aceite esencial de Curcuma aeruginosa Robx puede aclarar la piel e inhibir el crecimiento de vello en tres semanas. Así, se puede decir que la cúrcuma presenta compuestos que generan este aclaramiento de la piel.
Algunas recetas para la piel son:
Se mezclan los ingredientes y se aplica sobre el rostro, dejando actuar al menos 15 minutos, como mascarilla.
Puede haber riesgo de quedar naranja o amarilla por unos días y mientras dure el proceso. Puede ser una buena opción para personas de piel más oscura, en las que el teñido se notaría menos, que quieran un tono más claro (como las indias).
Se advierte que es importante conseguir cúrcuma original y de buena calidad, para evitar aquellas versiones a las que se les ha añadido colorantes artificiales (para la cocina), que pueden dañar la piel y volverla aún más anaranjada.
Por otra parte, existe un tipo de cúrcuma, la cúrcuma Kasturi o arómatica, que no deja color y tampoco es comestible. Se considera que sirve para aclarar la piel, sin la desventaja de quedar amarilla.
Otro método natural popular es el de usar harina de arroz o agua de arroz.
Se trata de una receta de Oriente, que se popularizó gracias a la cosmética coreana. También se usa en Japón y en China.
Una manera en que se utiliza el arroz es con el agua de arroz. Esta es calmante, antioxidante, antiinflamatoria, aclarante, hidratante y anti-age. Es rica en aminoácidos, vitaminas y minerales, nutriendo la piel.
Como aclarante, el agua de arroz permite remover la hiperpigmentación, las manchas y el bronceado. Puede ser muy útil para las pieles claras, para ayudarlas a recuperar el tono original y uniformarlo.
Además, se considera que el agua de arroz puede ayudar a prevenir y aliviar el daño causado por el sol, con lo que este método se diferencia de otros procesos.
Hay tres formas de hacer el agua de arroz:
El agua de arroz se puede usar en forma de tónico, sea con un difusor o con un algodón. Se recomiendo utilizar el agua de arroz fermentada con un algodón e, incluso, diluida en agua, ya que es más fuerte.
El agua de arroz también puede usarse como base para máscaras (por ejemplo, agua de arroz con arcilla o fango en polvo) o para lavarse el rostro y el pelo (es un buen acondicionador).
Siempre que hagas agua de arroz es importante que la conserves en la heladera o nevera y que, antes de usarla, la huelas para verificar que no esté en mal estado. Si lo está, es mejor que la tires y hagas una nueva. Se recomienda no dejar el agua de arroz a temperatura ambiente por más de 24 horas, ya que pierde sus propiedades y puede ponerse rancia.
Otra forma de aprovechar los beneficios del arroz (también para aclarar o mantener la piel) es a través de la harina o el polvo.
Algunas recetas con harina o polvo de arroz para mejorar, uniformar o aclarar el tono de la piel son:
Se mezclan los ingredientes y se deja la mezcla sobre el rostro durante, al menos, unos 10 minutos, como mascarilla.
Otro ingrediente que se encuentra entre los aclarantes es el yogurt. Su capacidad de aclarar la piel, en realidad, se deriva de su contenido en ácido láctico, el cual también puede aplicarse de manera aislada, para hacer peelings.
Como vimos en los otros apartados, el yogurt es también base para mascarillas.
Además de aclarar la piel, se considera que tiene la capacidad de proteger del daño provocado por la radiación UV y de revertirla. Esto surge de un estudio del 2011, en el que también se observó que la aplicación de mascarillas de yogurt resulta en una piel más blanca, elástica y humectada.
También se considera que su contenido en probióticos ayuda a prevenir y tratar el envejecimiento de la piel, lo que también resulta en piel más clara, y a tratar manchas de edad o de sol, uniformando el tono.
Algunas recetas para mascarillas de yogurt son:
Por supuesto, no podrás usar recetas que contengan yogurt si padecés de alergia a los lácteos.
El yogurt a utilizar deberá ser el natural, sin aditivos como azúcar, jarabe de maíz de alta fructosa, colorantes o saborizantes.
La leche es otro ingrediente que se suele encontrar en recetas caseras para aclararse la piel, en tanto también se considera que sirve a este efecto.
Como el yogurt, su propiedad aclarante se debe a la presencia de ácido láctico.
La leche puede usarse como base líquida para una variedad de mascarillas y cremas como:
La leche, además, puede aportar otros beneficios para la piel (especialmente la leche de burra), de los que podés leer aquí
Por supuesto, tampoco es recomendable usar leche si tenés alergia a los lácteos.
Otro ingrediente natural que puede usarse para aclarar la piel, aunque menos conocido, es el sándalo, sea como polvo o como aceite.
Este remedio también tiene su origen en tradiciones orientales. Se encuentra con un uso medicinal tanto en el Ayurveda de la India como en la Medicina Tradicional China.
Es antioxidante, antimicrobiano, antiinflamatorio, antiviral y anticancerígeno.
Además, contiene alfa-santalol, el cual inhibe la enzima tirosinasa implicada en la melanogénesis. De esta manera, puede conseguir aclarar la piel, tratar las manchas y uniformar el tono. También se lo usa como remedio para revertir el bronceado.
Algunas recetas con polvo de sándalo son:
Ya viste que este ingrediente aparece en varias recetas para aclarar la piel. Esto es porque se considera que también sirve a este efecto, además de otros beneficios.
Se atribuye esta capacidad a la presencia de peróxido de hidrógeno (aka agua oxigenada).
Asimismo, un estudio del 2018 indica que ciertos tipos de miel pueden contener actividad que inhibe la enzima tirosinasa, responsable de la producción de los melanocitos que dan la pigmentación.
Además, se considera un remedio natural para tratar quemaduras solares, aclarar cicatrices y rejuvenecer la piel (algo que, como mencioné, también aclara)
Algunas recetas para aclarar la piel con miel:
Puede convenir no usar la miel en caso de alergia a productos de abeja, como el polen.
Otro ingrediente que es considerado como aclarante son las papas. Normalmente se las recomienda para tratar las ojeras de manera natural.
Este efecto es muy suave y se atribuye a una enzima llamada catecolasa.
Desafortunadamente, no hay estudios clínicos que avalen esto ni la mayoría de los beneficios para la piel que se le atribuyen. Además, puede causar efectos secundarios, especialmente si hay sensibilidad o alergia. (Sí, se puede tener alergia a las papas)
Esto se atribuye al contenido en látex, un alérgeno, y una proteína llamada patatín. La alergia puede activarse tanto con papas crudas como cocidas. Se considera, además, que es más probable sufrir de este tipo de alergias si se tiene alergia al polen.
En caso de alergia, las papas pueden causar comezón, irritación, rojez, ampollas y eccema, al aplicarse sobre la piel.
Si no padecés de ninguna alergia y has comprobado el efecto aclarante de las papas, puede ser una opción a este efecto. Sin estudios y todo, se pueden encontrar personas que han conseguido resultados.
Algunas recetas que encontré son:
Estas recetas requieren hervir y procesar las papas y otros ingredientes como arroz.
Se pueden hervir con la leche.
Como dije, no todos los métodos naturales son buenos. No tanto respecto a su efectividad, sino más a su seguridad.
Uno de los más populares es el uso de limón.
El limón es añadido a muchas recetas para aclarar la piel y, efectivamente, puede ayudar a este fin. Sin embargo, causa indudablemente una mayor sensibilidad a la luz solar.
Además, debido a que es “natural”, se suelen obviar los cuidados con protector solar.
Esto puede resultar en fitofotodermatitis, una dermatitis de contacto que ocurre por la exposición a ciertas sustancias vegetales y luego al sol. Esto causa inflamación, irritación, manchas, ampollas y picazón. * *
Esta enfermedad no está circunscrita al limón, sino que incluye una serie de plantas que contienen psoralenos, que son fotosensibilizantes, como zanahorias, apio, perejil, eneldo, otros cítricos, como la lima, el pomelo o las naranjas.
Usar protector solar puede prevenir la fitofotodermatosis.
Las recetas con limón pueden usarse, pero sólo si observás que no tenés ninguna reacción adversa y no vas a pasar tiempo en el sol.
Debido a sus riesgos y a la cantidad de recetas con limón en Internet, decidí dejar a este ingrediente de lado. Me temo que esas recetas con limón hacen que parezca demasiado fácil y se olvidan los cuidados.
Otro ingrediente “natural” utilizado para aclarar la piel es el agua oxigenada.
Aunque puede ser eficaz para aclarar la piel, presenta más desventajas que beneficios.
Para aclarar la piel, se necesita una concentración del 20% al 30%, lo que es bastante más que lo recomendado de hasta el 3% para la piel.*
Usar agua oxigenada sobre la piel en grandes concentraciones y en tiempos prolongados puede tener serios efecto secundarios, como rojez, picazón, irritación, quemaduras, dermatitis, ampollas y urticaria. Además, puede dañar los ojos en caso de contacto y aumenta el riesgo de cáncer. * *
Así, es mejor evitar el agua oxigenada y elegir cualquier otro tratamiento, más apropiado, para aclararse la piel.
Las recetas con bicarbonato de sodio para tratar la piel pululan en la Internet… Y es pésimo.
Se afirma que es ideal para blanquear la piel por ser eficaz para exfoliarla y limpiarla, con lo que se remueven las células pigmentadas.
Esto no tiene mucho sentido y definitivamente no es una opción segura para blanquear la piel (aunque sí para blanquear los dientes).
Esto se debe a que el ph de la piel es levemente ácido, entre 4 y 6, idealmente alrededor de 5. El bicarbonato de sodio, en cambio, es básico, es decir, su ph es muy alto.
Así, cuando lo aplicás a la piel, podés desequilibrarla y eliminar la microflora que la mantiene sana. Esto puede desencadenar distintas afecciones como dermatitis, acné, irritación, descamación o inflamación.
Exfoliar tu piel con él solo hace el problema peor. Además, se pueden usar otros elementos para la exfoliación, como arcilla, polvo de carozo de damasco o hasta la afeitadora Gillete.
Así que evitá usar bicarbonato de sodio sobre tu piel. No es su lugar.
Tampoco es bueno usar la pasta dental para aclarar la piel ni para hacer mascarillas.
Es un producto ideado para los dientes, que contiene alcohol, flúor y peróxido.
Puede irritar la piel, resecarla, desequilibrarla, al no tener un ph adecuado, provocar descamación y fotosensibilidad, es decir, se generan manchas cuando te exponés al sol.
También se dice que, aunque a corto plazo parecen combatir el acné, secando los granitos, pueden luego causar otro brote.
En definitiva, es un producto del que se encuentran recetas caseras para utilizar en la cara, pero que, en realidad, debilita la piel.
Si todos estos ingredientes son irritantes, imaginate la combinación.
No necesitás ninguna receta que contenga una combinación de estos. Tampoco el bicarbonato con limón ni con vinagre.
Si querés métodos caseros, mejor atente a otros más seguros y probados. Las recetas naturales que mencioné más arriba pueden hacer su trabajo, con menos riesgos.
A veces, los métodos naturales son extremadamente suaves y puede ser más fácil rendirse antes de obtener resultados.
Por otra parte, no hay que dejarse engañar por lo “natural”. A menos que se indique una protección añadida contra la radiación UV, también hay que tener cuidado con el sol y usar protector, sea comercial o casero (mientras sea efectivo y seguro).
E, incluso si hay fotoprotección añadida(como con el arroz), usar protector facilitará el proceso, al evitar que se produzca mayor daño y bronceado. Es, además, parte fundamental de una rutina de cuidados.
Por último, si estos métodos te recuerdan demasiado a la cocina y no es lo tuyo, existen cosméticos basados en estos ingredientes.
Hablando de cosméticos, vamos ahora a ver los otros métodos para aclarar la piel:
Otro método suave para aclararse la piel es con el uso de cosméticos de venta libre. La efectividad de estos va a variar según el producto y sus principios activos.
Estos pueden tener otros efectos beneficiosos para la piel, además de aclararla. Algunos son también utilizados para hacer peelings, de los que te contaré más adelante.
Para que el cosmético aclare la piel, debería contener alguno de los siguientes ingredientes:
Estos son usados para hacer peelings. Sin embargo, actualmente se los encuentra en diversos cosméticos aclarantes.
Estos ácidos son:
Se los puede encontrar, por ejemplo, en cremas en bajas concentraciones, como del 1% al 3% (para hacer un peeling, las concentraciones pueden llegar hasta el 10%).
El efecto que generan sería como una exfoliación suave a largo plazo.
Para conocer más sobre estos ácidos, podés leer el artículo sobre peeling.
Además de los AHAs, existen otros tipos de ácidos que también tienen efecto aclarante.
Estos son:
También se utilizan para hacer peelings.
De estos, el ácido kójico es especialmente conocido por tener efecto aclarante, al inhibir a la enzima tirosinasa. Así, es útil para tratar las ojeras hiperpigmentadas y las manchas.
También podés saber un poco más sobre ellos en el artículo de peelings.
Hay cosméticos que utilizan combinaciones de ácidos para lograr efecto. Normalmente, estos productos están formulados de manera que no resulte irritante a la piel.
Como mencioné, hay cosméticos que contienen o su formulación se basa en los efectos de ingredientes naturales a los que se les conoce propiedades aclarantes. Estos incluyen no sólo los que mencioné anteriormente, sino otros más complicados de conseguir, pero que son usados por ciertas empresas de cosméticos, como flores tropicales.
Así, estos cosméticos pueden contener:
Por supuesto, varios de estos se pueden usar de manera casera. Simplemente no los incluí en la lista, por no ser exhaustiva, sino ejemplificativa.
La fangoterapia y la vinoterapia son tratamientos más que nada anti-age, que pueden generar cierto blanqueamiento de la piel.
Sin embargo, este se debe a la reversión de los síntomas del fotoenvejecimiento. Así, no se trata necesariamente de inhibir la producción de melanina.
El retinol o vitamina A es un activo anti-age por excelencia, que también tiene el efecto de aclarar la piel.
Fomenta la renovación celular de la epidermis, con lo que se descaman las células que contienen más melanina.
Además, afecta el proceso de la melanogénesis, al reducir la actividad de los melanocitos y la enzima tirosinasa.
De esta manera, contribuye a aclarar la piel, uniformar el tono y reducir las manchas.
Podés leer más sobre el retinol y sus beneficios en este blog.
Los peelings pueden cumplir varias funciones. Una de estas es el aclaramiento de la piel. Ciertos tipos de peeling sirven específicamente para lograr este resultado. Sin embargo, la mayoría suele buscar el rejuvenecimiento de la piel, lo que también tiene como resultado una piel de uno o dos tonos más claros. Esta puede ser una excelente opción para quienes buscan recobrar su tono original.
Este tipo de peelings es el que principalmente se usa para aclarar el tono de la piel, al reducir la cantidad de melanina o inhibir su producción. Son prácticamente los mismos que se agregan a los cosméticos, pero usados en mayor proporción.
Así, ácidos que se usan con el fin específico de aclarar la piel son:
Tené en cuenta que cumplen una función de renovar la piel y que, para obtener resultados claros, pueden ser necesarias varias sesiones.
Estos incluyen tratamientos como el dermaplanning o la punta de diamante.
Su principal función es el de la renovación de la piel, lo que la rejuvenece. Es como consecuencia de este rejuvenecimiento que se aclara la piel, al revertir los síntomas del fotoenvejecimiento. Asimismo, ayuda a uniformar el tono y eliminar manchas.
Otra forma de aclarar la piel es con el uso de aparatos en centros de estética, gracias a herramientas como el láser o la luz.
El láser es uno de los tratamientos más efectivos para tratar las hiperpigmentaciones o manchas, así como para aclarar la piel en general. También es el más caro y el que más riesgos tiene.
El procedimiento lo puede realizar un dermatólogo, especialmente si hay alguna afección, como melasma, cicatrices de acné u otros.
Algunos centros de estética también ofrecen el tratamiento con láser para aclarar toda la piel del rostro o de zonas del cuerpo, como las axilas o el área genital.
Según el tipo de láser, los resultados y cuidados pueden variar.
Un tipo de láser es el ablativo, que puede ser efectivo con una sola sesión, pero tiene más efectos secundarios y un tiempo de recuperación de 2 a 3 semanas mínimo.
Este puede vaporizar las manchas, así como fomentar la producción de colágeno y elastina y la generación de nuevo tejido, el cual será más claro.
Así, es como un tipo de peeling, generando un daño controlado en la piel, para estimularla.
Otro tipo de láser es el no ablativo. Este no daña las capas de la piel, por lo que el tiempo de recuperación es menor. Sin embargo, requiere de más sesiones.
También existen varios tipos de láser ablativos y no ablativos. Por ejemplo, el láser CO2 y el Erbium:YAG son láseres ablativos. El Fraxel es un láser no ablativo. Existen muchos láseres distintos, en los que no me voy a detener acá.
El láser CO2, por ejemplo, se puede usar para aclarar la zona genital, aplicándose de manera fraccionada, con previo uso de analgésicos tópicos. Luego del tratamiento, se dan cremas analgésicas y cicatrizantes y se recomienda usar ropa suelta que evite la fricción. Puede tardar más de una sesión. *
Por otra parte, el láser también se usa con otros fines y el aclaramiento puede surgir como un efecto aparte del resultado principal. Así, se sabe que el láser utilizado para la depilación definitiva tiende también a aclarar la zona tratada. Esto se puede observar especialmente en las axilas y también en rodillas y tobillos. Lo que es más dudoso es que elimine las manchas, dado que el láser utilizado en la depilación no fue pensado para este fin. Esto puede variar según el tipo de láser utilizado (distintos centros de estética pueden usar distintos tipos de láser para un mismo fin, según su nivel de inversión tecnológica).
Esto funciona para recobrar el tono original de la piel, eliminando las zonas hiperpigmentadas producidas por la depilación tradicional. * *
Los tratamientos con láser pueden llegar a tener como efectos secundarios:
Como mencioné, la posible aparición de estos efectos dependerá del tratamiento. No todos los tipos de láser pueden necesariamente generar los mismos. Es recomendable que consultes con el dermatólogo o cosmiatra acerca de los riesgos del láser específico que va a utilizar.
Se recomienda no fumar ni beber en las semanas anteriores al tratamiento, ya que estos comportamientos pueden resecar más la piel, predisponer a la aparición de más efectos secundarios y dificultar la recuperación.
Y, como ya sabés, hay que usar protector solar y evitar el sol luego del procedimiento, como cuidados principales.
Este es otro tipo de láser, también útil para aclarar la piel y uniformar el tono.
Sirve para desvanecer manchas y reducir la rojez propia de la rosácea. El haz de luz que emite el dispositivo disminuye la hemoglobina y la melanina.
El tratamiento puede durar entre 3 a 6 meses, con una sesión por mes.
Pueden aparecer efectos secundarios como:
Este tratamiento es útil para recuperar el tono original de la piel y uniformarlo.
Por supuesto, también requiere mantenimiento. *
Se basa en el uso de una luz visible que no genera calor y no emite radiación UV dañina. Se puede usar con varios propósitos, según el color.
Así, la luz verde es la que se utiliza para la hiperpigmentación, con lo que sirve para eliminar manchas, uniformar el tono y tratar otros problemas relacionados con la hiperpigmentación, como las ojeras.
Esta luz actúa directamente sobre los melanocitos, reduciendo la producción excesiva de melanina.
La luz roja, por otro lado, se suele usar en tratamientos anti-age, dado que estimula a los fibroblastos a producir más colágeno y elastina. También ayudaría a que las manchas tarden más en reaparecer.
Se considera que este tratamiento no suele presentar efectos secundarios ni requerir cuidados especiales. Es indoloro y no invasivo.
Aún así, recomiendo tener siempre los recaudos ya mencionados frente al sol, para que no se arruine el resultado y este sea más duradero.
Como ves, estos tratamientos con aparatología tienen en miras más bien corregir y uniformar el tono de la piel.
Pueden requieren de ciertos cuidados, preparación previa y mantenimiento.
Es recomendable que siempre consultes en el centro de estética o clínica en que lo vas a realizar. Allí se te explicará todo lo necesario sobre el procedimiento, efectos secundarios y cuidados. Si no lo hacen, andate.
Por último, si no hay más opción, se puede recurrir a un dermatólogo. Esto es más recomendado en el caso de tener mucho melasma (manchas).
Digo como última opción porque un dermatólogo puede recetar productos que son más fuertes de los que podría usar una cosmetóloga o cosmiatra, como la hidroquinona.
Este ingrediente incluso está “mal visto”, en el sentido de que se vendía de manera libre cosméticos que lo contenían, provocando serios efectos secundarios en las usuarias, que no estaban bajo supervisión médica.
La hidroquinona puede tener como efectos secundarios:
Dado esto, su uso sin receta médica se encuentra prohibido en un número de países. Si no es el caso en tu país, te recomiendo que evites este ingrediente. *
Por otra parte, si el dermatólogo te receta el uso de un producto como este, deberás ser aún más estricta en tus cuidados. Seguí sus instrucciones y no continúes usándolo si observás efectos secundarios persistentes.
Un dermatólogo también puede hacer peelings, siempre de una manera más fuerte y efectiva, pero que puede conllevar más riesgos (y por eso debe realizarlo un médico).
Y, como mencioné, también puede hacer tratamientos con láser.
Siempre consultá primero.
En lo posible, considero que es mejor elegir la opción más segura.
Por ejemplo, se podría hacer un peeling suave con ácido mandélico y cuidarse mucho con protector solar e hidratación.
O directamente usar cosméticos y métodos naturales, si se prefiere, sin olvidar nunca cuidarse.
Por otra parte, si ves que estos métodos no van a serte efectivos, podés optar por algo más fuerte.
Para casos graves de manchas o patologías que causen hiperpigmentación, acudir al dermatólogo.
En principio, se considera que no hay método real para aclarar la piel de manera segura. Lo que tiene sentido si se tiene en cuenta que, para lograr un aclarado real, se requiere la destrucción de la melanina o la inhibición de su producción. La melanina cumple una función de protección. Por eso el proceso de aclaramiento suele dejar a la piel más expuesta y fotosensible.
Dado esto, hace falta un proceso que necesita tiempo. Cualquier método que busque un resultado rápido es o muy dañino o tiene muchos riesgos o sólo ha revertido síntomas de fotoenvejecimiento.
Por otra parte, el tema de aclarar la piel, la autoestima y los resultados rápidos son toda una cuestión social en ciertos países.
Buscando resultados rápidos y con una mala concepción sobre el color de piel, muchas mujeres se han dañado y provocado enfermedades en sí mismas.*
Esto se debe a la presencia de cremas que prometen resultados rápidos rápidos y que, para lograrlo, llevan compuestos como mercurio o hidroquinona. Asimismo, puede que estén prohibidas, pero sean vendidas en el mercado negro, lo que les permite llegar a los salones.
Por todo esto, cuando se habla del aclarado seguro de la piel, hay que pensar en conseguir resultados realistas y alcanzables respecto al tipo de piel que se tiene, en que es un proceso que va a tardar tiempo, en que va a requerir mayores cuidados y en que hay que pensarlo bien antes de comenzar. Debe ser una elección consciente.
Por eso digo que, para pieles morenas, lo mejor es pretender aclarar simplemente un par de tonos y no tratar de ser blanca. A veces, esto puede lograrse haciendo tratamientos que revierten el fotoenvejecimiento, dado que este oscurece y opaca la piel.
Ahora, si creés que con una piel un par de tonos más blanca te verías más bella, adelante, hacélo. Siempre y cuando no sea por autodesprecio.
Irónicamente, la gente muy blanca también sufre de este autodesprecio, lo que se puede ver en la insistencia en broncearse.
Retomando, sí se puede considerar que ciertos métodos son más seguros que otros.
Sopesando tanto la efectividad como la seguridad, podés realizar tu elección de método.
Aclararse la piel no debe ser una decisión tomada a las apuradas. Primero es necesario tomar en cuenta ciertos factores:
Primero revisá tus razones. Puede ser que quieras recuperar tu tono más blanco, que quieras corregir manchas e imperfecciones o que quieras cambiar tu tono normal a uno más claro. Cualquiera sea, es importante que no venga desde el autodesprecio.
Así, deberás conocer tu fototipo y, a partir de él, evitar tener expectativas poco realistas o dañinas.
Asimismo, conocer tu biotipo, es decir, si tu piel es grasa, mixta, seca o normal, te ayudará para saber qué tratamientos hacerte y los cuidados posteriores. Así, una piel grasa suele ser más resistente y una seca requerirá de mayor humectación después
Además, debés contar, preferentemente, con una rutina de cuidados previa, que garantice ya la presencia de hábitos que hagan exitoso el proceso de aclarado.
Debés tener en cuenta que el proceso llevará su tiempo y que deberás tener disciplina y constancia para ver resultados de manera segura y efectiva. Nunca busques resultados rápidos ni te descuides.
Los métodos pueden ser variados, desde los naturales hasta aquellos con aparatología, como el láser. La elección va a depender de un balance entre seguridad, eficacia y tus preferencias.
Siempre recordá cuidarte luego del tratamiento, así como mantener el resultado. El protector solar suele ser el mejor aliado para ambos.
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